Empezando otra vez...

He intentado iniciar varias veces un blog. Siempre que empiezo me encuentro ante la misma pregunta: ¿de qué cornos podría hacer un blog?

Me encantaría que sea un blog que guste, que sea legible, que se actualice seguido. Lástima que, dentro de las hipótesis de mis posibilidades, estas tres condiciones son mutuamente inconsistentes. Cuando intento hacer un texto medianamente legible y que guste, caigo en la revisión, rerevisión, recontrarevisión y todo termina, finalmente, en la papelera de reciclaje, para nunca más ser visto. No. No sirvo para eso. Podría hacer uno que guste, y que se actualice rápido. No sería legible. Tal vez sí, yo qué sé...

Nuevamente, ¡no sé de qué escribir! Pero en algún momento las palabras querrán salir. Y para esto está éste blog. Un blog reciclado, con nombre reciclado. Ya lo había tenido en un anterior y abandonado blog, creo que es mi título favorito. Es el nombre que lleva un espacio topológico, interesante para mostrar algún contraejemplo, pero no para verlo. Creo, en cierta forma, que mi blog tendrá algo de eso.

He decidido que tenga algo del anterior... anteriores blogs. Que vaya a la deriva. Esperemos que les guste.